lunes, 8 de febrero de 2021

 

Este relato me hizo pensar mucho la primera vez que lo leí, por eso quería compartirlo con vosotros, para que pensemos que los ricos son pobres y viceversa. El miedo a lo desconocido y el desconocimiento hace, por una parte que no valoremos lo que tenemos y por otra que despreciemos todo aquello que desconocemos o que no encaja en nuestra vida.

Un hombre chino verdaderamente rico envió a su hijo a la zona rural para que experimentara la pobreza. Su hijo vivió con una familia durante 3 días y cuando regresó a casa tuvo la siguiente conversación con su padre. 

El padre preguntó: “Entonces, ¿cómo fue?” 

A lo que el niño le respondió: “Creo que muy bien” 

“¿Y encontraste alguna diferencia entre su casa y nuestra casa?”, preguntó el padre.
“Guay!, un montón”, dijo emocionado el niño. Y siguió, “Nosotros tenemos un perro, pero ellos tienen cuatro”. 

“Nosotros saneamos el agua de nuestra piscina pero ellos tienen un gran estanque con agua fresca y clara, ¡donde viven incluso peces!”. 

“Tenemos bombillas en el jardín mientras que la luna y las estrellas iluminan sus campos por la noche”. 

“Nuestro jardín está limitado por vallas, pero el suyo es ilimitado. Se extiende desde el horizonte hasta el cielo”. 

“Nosotros escuchamos los CD’s de música de vuelta a casa. Ellos sin embargo escuchan el canto de los pájaros y otros sonidos de la naturaleza”. 

“Nuestra casa está rodeada de muros, pero ellos siempre reciben a sus amigos porque sus puertas siempre están abiertas”. 

“En la ciudad, los teléfonos móviles y los ordenadores nos conectan. Allí, la gente está estrechamente conectada con la naturaleza y sus familias”. 

El padre no podía creer lo que su hijo estaba diciendo. “Papá, gracias por dejarme saber lo pobres que somos en realidad”, dijo el hijo. 

“Hay gente tan pobre que sólo tiene dinero”. Rodolfo Costa 

 

 Aporofobia, el neologismo que da nombre al miedo, rechazo o aversión a los pobres, ha sido elegida palabra del año 2017 por la Fundación del Español Urgente, promovida por la Agencia Efe y BBVA. Aporofobia, del griego áporos (pobre) y Fobos (pánico).

Las personas sin hogar  generalmente son hombres, pero las mujeres son especialmente vulnerables porque están expuestas a la violencia sexual y no olvidemos a los niños que crecen en un entorno desfavorable. Ellos son las verdaderas victimas social y culturalmente

  ¿qué puedo hacer yo?   Como empleado publico , y con atención al publico diaria, cada día veo situaciones de discriminación. Lo que ...